lunes, 15 de febrero de 2010

sábado, 2 de mayo de 2009

Despues del trabajo en el pico, arrejunde que las cabras te están llamando.


Male (Esperanza) tenía la mayor parte de sus tierras en el cráter del volcán de Montaña Alta, y allí se dirigía todos los días desde que Victoriano (Pale) enfermó. Allí se hizo con el liderazgo del ganado y de las papas y el millo que plantaban cada año. En la foto, con 74 años, tomada por tanto en 1994, ella baja con su característico paño enrollado en la cabeza y un balde equilibrado sobre ella, con unas papas, alguna piña, jaramagos y una botella de agua. Serían las siete de la tarde, por la luz, y se le ve vigorosa y activa, posición que se resiste a abandonar a pesar de la dificultad de una columna que a los actuales 90 años no le deja hacer lo que ella desea.
Está junto al pilar, junto a la iglesia y al comienzo de la que hoy se llama Calle La Sillailla que va a terminar en un par de kilometros de subida, donde ella plantaba y criaba vacas.

domingo, 29 de marzo de 2009

El tiempo pasa


Esta foto fue tomada un año antes de que Victoriano y yo nos conocieramos. La foto es un recorte de la que tenemos de la boda de su hija mayor, Lolina, en el año 1964. Han pasado casi 17 años desde la foto anterior y la dura posguerra de las Medianías pasa factura. Victoriano ya es un hombre con carga y su mirada nos ofrece trabajo, lucha y entrega total a su familia en tiempos realmente duros. Su piel está limpia y su tímida sonrisa no termina de ocultar por discreta satisfacción que es un buen y feliz día para su hija.
Solo han pasado 5 años desde el Plan de Estabilización de los López y España sigue siendo un país realmente pobre, más aún las montañas de Gran Canaria, y aún más quien trabaja tierras de secano y espera, junto a Esperanza, que caigan cuatro gotas. Hay años malos, y otros peores.
En próximos comentarios pondré su primera nómina oficial, una pesetas semanales, por peonadas en tierras de los Samsó. El fue uno de los que abrió los hoyos para plantar ese pinar tan hermoso e inflamable que en los años cincuenta y sesenta colocaron en Las Solapillas, entre Marente y El Marqués. Arrancando tierra, asurcando con yuntas, ordeñando vacas, segando en las Majadillas, "tira pa riba tira pa bajo"....viviendo y desviviéndose por los suyos.
Gracias Pale.

lunes, 16 de marzo de 2009

Victoriano

Victoriano nació poco después de la primera gran guerra, aunque esa no le marcó, allí en los Altos de Guia, tan lejos de la Europa Central. Las tierras de sus padres estaban justo abajo, al fondo de la ladera en cuya cima pastaban las ovejas de Esperanza.
Transcurrieron unos 19 años y después del 18 de julio, en tiempos de la 2ª República, lo arrancaron de su pueblo; lo embarcaron, surcaron el Atlántico hasta Galicia y casi a final de 1936, en pleno invierno continental, y a más de 2000 kilómetros de su pequeña tierra, llegaron a puerto los soldados canarios para dar tiros y matar a los enemigos de un tal Franco. Allí estaba Victoriano, con veinte años. En la foto aparece unos años más tarde, en torno a 1946, espléndido como nunca lo vimos, junto a su esposa y a su hija mayor.

viernes, 6 de marzo de 2009

Esperanza



Male, tiene ahora 89 años recién cumplidos. Nació en el año 1920 en una vivienda en cueva, dentro del cràter erosionado que forma el pico de Montaña Alta de Guia. De su familia, los León Quintana, es una superviviente, una joya y el enlace con la memoria de toda una familia, la respuesta a la pregunta ancestral sobre el camino recorrido: ¿de donde venimos?.
Es una llamada a la humildad, a la constancia, y a la entrega. Primero con sus hermanos, a quienes cuidaba envuelta en sacos y neblina, con un ojo en el ganado y otro en los muchachos; luego sus hijos, Lolina, Paco y Mina y mas tarde su esposo, Victoriano, otro superviviente, que padeció la escasez en un país pobre que dejaba a los enfermos en manos de sus mujeres. Disfruta de la tierra, su gran aliada y compañera y, aún a escondidas de sus hijos, se hinca y escarba en busca del tesoro que siempre guarda para ella.